¿Puede Trump cambiar el nombre del Golfo de México a “Golfo de América”?

El expresidente y ahora presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, sorprendió al mundo al declarar su intención de cambiar el nombre del Golfo de México por Golfo de América. La propuesta, que forma parte de una serie de políticas exteriores polémicas, ha generado reacciones de incredulidad y burlas tanto en México como en la comunidad internacional.

Aunque la idea ha sido respaldada por figuras del Partido Republicano, como la congresista Marjorie Taylor Greene, en términos prácticos, cambiar un nombre geográfico de carácter internacional no es tan sencillo. Estados Unidos podría modificar la denominación utilizada en documentos oficiales dentro de su territorio, pero no tiene autoridad para imponerlo a nivel global.

Existen precedentes de cambios de nombres dentro de EE.UU., como cuando el expresidente Barack Obama ordenó en 2015 la modificación del nombre del monte McKinley a Denali en Alaska, una decisión que Trump intentó revertir sin éxito. Sin embargo, el Golfo de México es un nombre reconocido a nivel internacional por la ONU y por tratados geográficos, por lo que cualquier intento de modificación unilateral no tendría validez fuera de Estados Unidos.

En conclusión, aunque Trump podría influir en cómo se refiere al Golfo dentro de documentos y mapas estadounidenses, cambiar su nombre oficial a nivel internacional requeriría un acuerdo con México y otros organismos internacionales, algo altamente improbable.